Todo el mundo parece más contento, más amable en sus
gestiones diarias, con un tono de ojeras menos violáceo… Será porque estamos de
enhorabuena. Al fin los ciudadanos podemos admirar las fotos más buscadas. Y no
me refiero a Rajoy en el diván de un psicoanalista argentino o a la finolis de Anne
Igartiburu hurgándose la oreja con el meñique, sino a los besitos que Pilar
Rubio con el último yogurín que se ha ligado. Dicen que Sergio Ramos y ella
forman la pareja del momento; a mí me parece que más de que hotel en hotel de
madrugada les pega ir a por pipas y montar en patinete. La deseada Pilar le
lleva 8 años, pero es que además él es… futbolista. En su pasión el chaval no
ha dudado en tatuarse en la mano la palabra “Rubio”. Lo mismo le vale para
Pilar que para Paulina, ahora que está divorciándose, que para pasearse por
Chueca si cambia de acera. Tanta originalidad me desborda.
Otros preferirán la imagen de Tita Cervera llorosa al salir
de la clínica Ruber donde nació su tercer nieto. Cuentan las crónicas del cuché
que habló con Borja durante una hora, después de pasarse dos años haciéndolo a
través de las revistas, pero también leo que no pudo ver al pequeño, próximo
guardameta de ese equipo de fútbol infantil con el que se entretienen este par
de ociosos. Tal vez Blanca impidió su entrada para que no se le cortara la
leche de sus pechos siliconados. Pero eso ya nos lo comentarán ellos en la
exclusiva de Hola dentro de dos semanas. ¡Ya imagino el modelito de la
pornomami!
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"¿Se me ve bien, cari?" |
De las revistas que salieron floreció una nueva novia con
cancha para rato. La de Bisbal. Raquel Jiménez, como diría mi madre sutilmente,
no se puede decir que sea una belleza, pero va firmando sus contratillos,
haciendo cash y dando entrevistas. Por cierto, como nos temíamos, David no para
de canturrear todo el día, pero ella aún no ha llamado a los geos. Al
contrario, sonríe mucho y abraza a la suegra en el aeropuerto. Ella no es como
la snob de Elena Tablada, que andaba tres pasos por delante de ella cuando iban
de tiendas por Miami para que no las relacionaran.
A Nuria Roca le han dado una Antena de Oro. ¿Para consolarla
por los sucesivos batacazos de sus últimos programas? Si me oyera, me
replicaría que la propia Igartiburu tiene espacio para dar rienda suelta a su
cursilería o Jose Toledo, esa que sin sacacorchos no hay quien la oiga hilar
una frase con sentido. Y tendría razón.
Al menos hoy ponen Quién quiere
casarse con mi hijo.¡Chonis al poder!
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